Cada vez me gustan mas las bodas poco convencionales, y la de Solange desde luego que lo ha sido, todo en contra de las reglas de una boda clásica: invitados de blanco, llegada de los novios juntos de la mano en unas bonitas bicis de color blanco, la novia enfundada en un mono blanco con capa, y el ramo en lugar de portarlo la novia, lo llevaba en la cesta de su bici.



En lugar de vestido, Solange opto por un mono con capa en color crudo, con aberturas tanto por delante como por detrás, diseñado por  Stephane Rolland, para poder acudir en bici hasta la iglesia y después se volvió a cambiar por el vestido que se ve en la foto con todas las mujeres de la familia, de corte minimalista blanco y hasta los pies y también con capa , de Kenzo y solamente acompañado por dos brazaletes dorados.


A mi personalmente me encanta que en las bodas se huyan de los convencionalismo y que no se sigan los mismos patrones que parece que están establecidos. Lo mas divertido es que en una celebración de este tipo como una boda, sea única para las personas que lo viven en primera persona, defina su personalidad y cada uno lo sepa adaptar a su esencia y a su estilo. Porque no todas las personas son iguales, ¿Porque tienes que ser todas las bodas iguales?.